Al recorrer la selva encontré la senda que marcas cada día alrededor de mi vida.
Desnudas tu hombro con apuntes de examen entre las manos, sin tiempo para recubrir de esmalte tus uñas, una liana se descuelga de tu pelo entre tus dedos, la brillante oscuridad de la selva amazónica cobra vida >en la misma senda donde el jaguar es un animal de pisadas invisibles> tu identidad se desnuda ante mis ojos, abriga sonidos de aves del paraíso y monos aulladores que envuelven y ven crecer la selva alrededor de estas palabras que en latín son: <<Apsis ipsum ille>>, de juramento hipocrático; pronunciadas:
Al grito que inunda esta selva
Al grito que moja tu piel de cálida lluvia
salvaré contigo mi vida hacia la felicidad del mundo y reinos de plantas medicinales que nos abren puertas a la inmortalidad.
